Algunas inocentadas

Os proponemos algunas inocentadas que son graciosas pero que probablemente no enfadarán a la víctima, que para mí esas son las bromas graciosas.

Una que hacía Rafa que es una tontería, pero os podéis echar unas risas inocentes.
Si subes en un ascensor con alguien que vaya por ejemplo al tercero pues le das al segundo o al cuarto y hablas con el para distraerle cuando intenta entrar en su casa no puede hasta que se da cuenta que no es. Esta puede estar recomendada para todos los que tenéis casas en edificios nuevos, que todas las puertas son iguales.

Esta es una telefónica.
Buenos días le llamo de telefónica, es el numero de teléfono 91 ---- ---?
Si
Pues tire del cable, que aquí sobra.

Otra que gastaba yo de pequeña era abrir a mi padre una nuez con mucho cuidado, vaciarla y pegarle dentro un muñeco de inocente, después, la pegaba con super glue y no veáis la cara que se le quedaba a mi padre después de tirarse una hora para abrir la nuez.

Esta también la hacía Rafa en sus tiempos mozos, a mí me parece un poco desagradable.
Coges una bolsa de papel, metes una caca dentro, la pones delante de una puerta, la prendes fuego y llamas al timbre. Cuando abran la puerta y vean la bolsa ardiendo la intentarán apagar pisándola.

Podéis también pegar un cartelito a alguien en la espalda en el que diga que le digan alguna cosa, seguramente la gente colaborará, puede ser algo como..."llámame tío bueno".

Siempre está la de hacer algo a alguien por la noche, como pintarle la cara o ponerle algo en la frente.

Existe también el juego de "Te pellizco y no me río" el juego consiste en coger un corcho e ir quemándolo con un mechero, nos sentamos todos en corro y el del corcho se sienta al lado del inocente. Entonces por turnos todos vamos diciendo "Te pellizco y no me río" pero claro, será imposible no reírse, porque el inocente tendrá toda la cara tiznada de negro...el pobre no se enterará de porqué los demás se ríen y se pensará que es tonto.

También está la broma de la petaca, que es con las sábanas, es una broma que Jessy y yo hacíamos siempre a Loren en Zarzalejo, consiste en poner la sábana encimera de la cama doblada, es decir, en vez de remeter la sábana por abajo, la remetes por arriba ,y luego la doblas y creas el embozo típico de la sábana. Cuando el sujeto en cuestión se mete en la cama se da cuenta de que no le caben los pies.

Otra que hacían mis padres de jóvenes era coser una manga del abrigo de algún jefe, entonces cuando el pobre hombre se iba a poner el abrigo no podía meter la mano por la manga y así el hombre se ponía a intentarlo una y otra vez.

Estas son aportaciones de Montse, me han encantado porque no conocía todas.

La típica que se hacía en mi pueblo era atar con una cuerda dos puertas y llamar el timbre a las dos a la vez, es una risa porque no pueden abrir la puerta.

Otra muy buena que suelen hacer entre los albañiles es mandar al nuevo a otra obra que esté en la otra punta del pueblo a buscar alguna cosa rara como la máquina de algo...no se me ocurren palabros raros ahora y cuándo llega a la otra punta del pueblo le tienen preparada una caja que contienen de todo y pesa un huevo. (Esto lo hacíamos nosotros en campamentos con la máquina de tensar vientos)

La de los camareros también está bien. Mando a un camarero o cliente a otro bar a por la máquina de hacer el hielo blando y evidentemente le preparan también un paquetito.

También se les da muy bien rebozar con harina y huevo los corcho de vino, freírlos y ponerlos como croquetas. Esta es muy buena para si alguien hoy tiene una cena de traje (yo traje esto, tú trajiste lo otro....)

Bueno, si se os ocurre alguna podéis ponerla en los comentarios, así tendremos un buen repertorio.